20110405

en el mercado

Cuando uno de nuestro hombres se encontraban en aprietos, no dirigíamos al mercado de cuerpos, desde los textos antiguos logramos encontrar como rescatar parte del ser en nuestro simbiontes. Por lo tanto si nuestros cuerpos no funcionaban, los podríamos cambiar. Aunque esto seria una pérdida de información, cuando el agente o el que necesitase nuestra ayuda fuese del pabellón que fuese, poseíamos centro de recolección de cuerpos. Los simios tenían la necesidad de apilarse y de clasificarse, es una necesidad extraña que solo poseen los simios y otros mamíferos que hemos estudiados. Por lo general en la mayoría de las especies que hemos estudiados, los mejores comportamientos son la de los enjambres o colonias. Los simios están destinados a desaparecer, su marginación de los unos y los otros los desunes y los débiles no son eliminados ni tampoco son apoyados. Solo son canalizados a lugares donde para nosotros cambiar de cuerpos es una garantía. Nuestros simbiontes en cuerpos humanos no dejan de ser útiles, sobre todos para hacer redadas.

Los mercados siempre cambian de lugar, hay algunos en donde los cuerpos están más desvalidos que otros, pero así en palabras en que un simio pueda entender. Todo aquel cuerpo de pierda las ganas de vivir, los inducimos al suicidio y ocupamos sus cuerpos. Dotamos de vida a esa masa inerte de huesos y carne en estados de putrefacción, para nuestros fines más diversos. Fines que para un simio no podrían tener ningún tipo de valides o importancia. Les hacemos olvidar su propia muerte y les dotamos de una inquietante duda constante sobre su vida. Un agente del Kaos sabe donde buscar cuerpos de simios, están por todos lados y son tan vulnerables a todo a que pierden la vida todo el tiempo. Es por ello que tenemos el tiempo suficiente para elegir el cuerpo adecuado.

Si estas leyendo esto, y eres un simio, habrás muerto hace mucho tiempo. Aunque no tengas recuerdos de ello, si tienes la sensación que las cosas ya no las disfrutas como antes. Que el sexo no tiene esa sazón de antes. E incluso aquellas drogas que consumen ya no te dejan en onda como antes. Estas consiente de lo perdido que esta el mundo y que todo aquello inventado por los humanos no posee ninguna validez en tu vida. Si no es así, vas para allá. Ahora bien, el mercado puede ser un hospital, un asilo de ancianos o un microbús escolar. Da lo mismo, en todos lados podremos encontrar un cuerpo que rescatar.

Esta vez busque uno para ti. No te diré donde lo saque, mataría todo el suspenso de estas líneas, además te queda mucho por leer aun. ¿Te puedo preguntar algo? ¿Aun sigues tomando las mismas pastillas?

Ahora bien, eres un simio que he elegido para que continúes con esta tarea. Soy John y hay cosas que aun ni yo logro entender. Sin embargo un día de estos nos encontraremos en el mundo de lo intangible quizá en un sueño o en una alucinación. Y podre decirte cual es tu misión.

Lo importante es que ahora sepas lo que sucederá, he viajado mil años, centurias terrestres mi cuerpo a cambiado de forma y de nombres. Para poder llegar a ti, y no ser visto, aunque no exista prueba de existencia esta tú. Y en ti implanto mi ser, ya no serás más llamado un simio. Desde ahora serás un miembro de mi nuevo pabellón.

No hay comentarios.: